ME HAGO LA INTELIGENTE

Hoy domino la psicología, mañana el mundo y próximamente chocolatelandia.

Si analizamos etimológicamente la palabra adicción, uno se encuentra con "a": no y "dicción": decir.

Esa expresión refleja una de las características de todos los adictos: la imposibilidad de comunicarse, de exteriorizar sus conflictos.

Esto implica en muchas ocasiones la imposibilidad de pedir por ayuda. Como consecuencia surge un aislamiento creciente y la instalación de un círculo vicioso de difícil resolución.

(me siento adicta, ¿vos no?)