Hoy no importa lo que digan (lo importante es ser feliz). Y yo no quiero juegos, yo no quiero enredos... Desde el primer momento preferí serte sincero: que no tengo dinero, ni quiero ser primero; sólo quiero un beso tuyo para subir hasta el cielo, sacar la mano a Dios y estarle agradecido por unirnos a los dos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario